* El Hombre y El Reino De Dios *





Jesús el Cristo vino para establecer Su reino prometido en las profecías. El es el Hijo de Dios y vino como Salvador y Rey.Su misión no sólo fue como el segundo Adán, para rescatar al hombre y restaurar su comunión con el Dios viviente, sino también como Príncipe de Paz, para conquistar el gobierno que Dios le había entregado al hombre, quien lo había perdido a manos del enemigo.
El ministerio de Jesús muestra lo que sucede cuando al gobierno de Dios vuelve a entrar en el escenario humano. Demostró la prueba de la presencia del Reino de muchas maneras. Su amor sin fin, gracia y perdón, Sus milagros poderosos y sanidades, Su poder sobre los demonios - todas estas cosas comprobaron que el gobierno de Dios estaba entrando en este mundo otra vez. Mostró a la gente cómo entrar en el Reino. "Arrepentíos, porque el Reino de Dios está aquí con vosotros ahora". Llamó a la gente a arrepentirse, a volver al gobierno amoroso de Su Padre celestial.
Siempre que la gente recibía ese gobierno, el creer Su palabra, el Espíritu Santo confirmaba el evangelio del Reino con señales, maravillas y milagros (He 2:3,4).
El Espíritu Santo mostró que la presencia del Rey era real (Hch. 2:22; Lc. 24:19; Jn 3:33-35; 5:19)Victoria del Reino. A lo largo de todo Su ministerio, Jesús entrenó a otros para el ministerio. Les dijo que moriría y resucitaría de los muertos; luego ascendería al Padre de entre ellos (Mt 20:18, 19; Jn 14:19-21). Pero no fue hasta después de que hubo resucitado que Sus seguidores comenzaron a darse cuenta de que el Reino no era sólo para el "dulce futuro" sino también para el "presente infestado de pecado". Empezaron a saber que Su muerte, resurrección y regreso al cielo había derrotado al infierno y deshecho en pedazos el dominio de muerte de Satanás sobre los moradores del planeta. Cristo prometió que el Espíritu Santo haría que el Reino de Dios funcionara a través de Sus seguidores, como había sucedido a través de El. Jesús dijo: "Verdaderamente os digo, el cree en mi, hará las obras que yo haga, y hará aun obras mayores que estas porque yo voy al Padre. Y lo que pidáis en mi nombre, yo lo haré, para que el Padre pueda recibir gloria en el Hijo. Si pedís algo en mi nombre, lo haré. Si me amáis, guardad mis mandamientos. Y yo pediré al Padre y os dará otro Consolador, el Espíritu de verdad, para que esté con vosotros para siempre. El mundo no puede recibirlo, porque ni lo ve ni le conoce, pero vosotros lo conocéis, porque vive y permanece con vosotros, y estará en vosotros" (Jn 14:12-17). También les dijo: "Edificaré mi Iglesia", anadiendo que "los poderes del infierno no tendrán victoria sobre ella, porque le daría las llaves del Reino de los cielos" (Mt 16:18,19). Después de volver a la vida y antes de regresar al cielo, prosiguió diciéndoles que esperaran un nuevo poder para el ministerio a través de la presencia y del poder del Espíritu Santo(Hch 1:1-8; 24:49 El Poder La venida del Espíritu Santo en Pentecostés fue el inicio de la Iglesia. El Espíritu Santo dio poder a cada miembro con la misma capacidad que el Rey. El Reino podía desplazarse entre ellos con poder, parar que pudieran conquistar toda obra de Satanás que se cruzara en su camino. la iglesia estaba y está formada de creyentes en Cristo que han nacido del mismo Espíritu que capacitó a Jesús. Nacida del Espíritu llena del mismo, la Iglesia comenzó a hacer la obra del Rey. Es la voluntad de Dios que esto continúe hasta que el vuelva como lo prometió (Lc 19:13). La gloria final de Su Reino sobre la tierra todavía está por venir. Hasta entonces, Su Cuerpo, la Iglesia, es la plenitud de Su Reino, alcanzando a toda persona de cualquier raza o nación que lo reciba voluntariamente.

Comentarios

Entradas populares de este blog

"El Hombre Que Se Parece A Las Aguilas".

* * DIos Levanta Una Generacion Profetica.* *

" El Hombre y La Cultura del Reino de Dios."